¿Por qué se enrollan las hojas de la marihuana? Aprende a identificar las causas y remediarlas a tiempo

Cuando las hojas del cannabis hablan, conviene escuchar

En el apasionante viaje del autocultivo de cannabis, tarde o temprano aparece un síntoma inquietante en las plantas: las hojas de abanico que normalmente lucen abiertas y relajadas…empiezan a curvarse como si intentaran esconderse del mundo.

Esto no es un capricho estético: las hojas enrolladas son una señal de que algo no va bien.

¿Por qué se enroscan las hojas de la marihuana?

La planta del cannabis deforma sus hojas como defensa al estrés. Algo en el ambiente se ha salido de los parámetros saludables, por ello, las hojas reaccionan en un intento de adaptarse a las condiciones que amenazan la salud de la planta.

Hojas de la marihuana enrolladas hacia arriba: defensa activa

Cuando las hojas aparecen curvadas hacia arriba por los bordes lo más probable es que sea una reacción a un exceso de calor. Esto sucede cuando la planta recibe una luz demasiado intensa en combinación con una humedad ambiental demasiado baja.

Esta es la forma en que la planta reduce la superficie expuesta y minimiza la pérdida de agua. Esto sucede cuando la temperatura en el cultivo, ya sea de interior o de exterior, supera los 30 °C durante horas.

Cómo solucionarlo

• Mejora la ventilación
• Cultivos en indoor: aleja el foco de la planta y programa los ciclos de luz en las horas más frescas del día.
• Cultivos de exterior: protege tus plantas de las altas temperaturas durante las horas punta, puedes usar mallas sombreadoras o toldos.

Hojas del cannabis enrolladas hacia abajo: sobrecarga interna

Cuando las hojas aparece curvadas hacia abajo, lo que comúnmente se conoce como "forma de garra", las causas más probables suelen ser:

• Exceso de nitrógeno
• Riego excesivo
• Sistema un sistema radicular colapsado a causa de una acumulación de sales minerales en el sustrato.
• Pudrimiento de raíces (probablemente provocado por un riego incorrecto o por un sustrato poco aireado).

Enrollamientos irregulares y extraños

Cuando el cultivador no es capaz de identificar qué tipo de enrollamiento de las hojas se está produciendo, puede ser que la deformación sea más compleja: hojas que se rizan como si fueran un pergamino, o que se tuercen de formas extrañas y asimétricas.

Estos casos requieren de un análisis más profundo, ya que suelen estar relacionados con enfermedades, carencias de nutrientes o plagas.

Cuando las temperaturas son demasiado bajas

El frío en el cultivo de cannabis también puede provocar que las hojas se enrosquen, normalmente lo hacen hacia abajo, y también podrá observarse una pérdida general de firmeza en la hoja.

Las temperaturas por debajo de los 15 °C ralentizan la actividad metabólica de la planta, dificultando la absorción de nutrientes y aumentando su exposición a patógenos.

¿Cómo solucionarlo?

• Cultivos de interior: aumenta la temperatura durante las horas en las que los focos están apagados y aprovecha las horas más cálidas del día para "poner las plantas a dormir".
• Cultivos en outdoor: crea la estructura para un invernadero que puedas cubrir durante la noche.

Desequilibrios en la humedad ambiental

El cannabis necesita de unos parámetros de humedad ambiental que varían según el estadio del ciclo en el que se encuentra. Tanto el exceso como la falta de humedad pueden provocar que las hojas se enrollen.

Mide regularmente la humedad relativa de tu cultivo con un termohigrómetro y ajústala según la fase de cultivo:

• Plántula: 65–70%
• Crecimiento: 50–60%
• Floración: 40–50%

Hojas curvadas por exceso de riego

Regar de más es uno de los errores más comunes en el cultivo de marihuana. Cuando el sustrato permanece constantemente empapado, las raíces se asfixian y dejan de absorber oxígeno, lo que deriva en hojas tristes, caídas y con puntas hacia abajo.

• Síntomas: hojas oscuras, blandas, tallo débil, olor a humedad en el sustrato.
• Solución: espera a que se seque el sustrato antes de volver a regar. Usa macetas con buen drenaje y controla el peso de la maceta como indicador de necesidad de riego, solo cuando al levantarla esté ligera, habrá llegado el momento.

Hojas de cannabis enroscadas por falta de agua

Las hojas se vuelven finas, secas, quebradizas y se enrollan como si buscaran conservar la poca humedad que queda.

• Solución: riego profundo, hasta que el agua drene por debajo de la maceta, pero solo cuando el sustrato lo necesite.
• Evita el "rieguito diario" superficial.

Exceso o carencia de nutrientes

Un desequilibrio en la alimentación de la planta puede advertirse, en ocasiones, porque esta curva sus hojas:

Exceso de Nitrógeno

Esto suele suceder especialmente en la fase vegetativa y provoca las famosas "garras de águila": hojas muy verdes, gruesas, que se curvan hacia abajo en las puntas.

• Solución: reduce la dosis de fertilizante y haz un lavado de raíces si el sustrato está saturado.

Deficiencias de calcio y potasio

Estas carencias normalmente se manifiestan en forma de hojas deformadas, enrolladas o con manchas entre los nervios.

• Solución: asegúrate de que el pH de riego esté en el rango adecuado (6.0–6.5 en tierra) para facilitar la absorción.

Normalmente el problema no es que no estés aportando los nutrientes, sino que la planta no es capaz de absorberlos. Analiza si hay una acumulación de sales en el sustrato y, de ser así, haz un lavado de raíces y luego aplica un fertilizante "mono" con el nutriente que falta.

Plagas y enfermedades

Insectos que deforman hojas:

• Ácaros: deformaciones irregulares y puntitos amarillos.
• Trips: mordeduras superficiales y hojas torcidas.
• Pulgones: chupadores de savia que provocan curvaturas hacia abajo.

Solución: inspección constante, trampas adhesivas, jabón potásico y, si es necesario, introducción de depredadores naturales como mariquitas o ácaros beneficiosos.

¿Cómo prevenir que las hojas se enrollen?

Si bien las hojas enrolladas no son el problema en sí, sino un síntoma que advierte de la necesidad de corregir algo que no va bien, la prevención siempre el la mejor aliada del cannabicultor:

• Controla temperatura y humedad a diario.
• No riegues por rutina, sino por necesidad real del sustrato.
• Usa instrumentos fiables para medir pH, EC y clima.
• Aporta nutrientes con cabeza: ni de más, ni de menos.
• Inspecciona el envés de las hojas como si buscaras pistas en una escena del crimen.
• Mantén limpio el entorno de cultivo. Sí, incluso debajo de las mesas.

Una hoja enrollada no es un problema en sí. Es una señal. Una forma que tiene la planta de pedirte que observes, que ajustes, que mejores el entorno que le estás ofreciendo. No se trata solo de seguir tablas o rutinas. Se trata de aprender a leer un idioma sin palabras, a veces basta con mirar de cerca para entender lo que una planta necesita.